¿Vives o Sobrevives?

¿Os acordáis de la capacidad de soñar? Y no me refiero a esa capacidad que con suerte hacemos 6-7 horas al día. ¿Os acordáis de esos momentos en los que solíamos cerrar los ojos y apretarlos fuerte fuerte? Parad un mometito, respirad hondo y recordad esa sensación, os espero un poquito más abajo…

Wwwoooowwww!! Ya estáis aquí con esa sensación y esa emoción. Sabéis que he descubierto y quiero compartir con vosotros, que somos seres Emocionales y Emocionantes. Todos y cada uno de nosotr@s, sin excepción. Y sabéis otra cosa, los sueños tienen esa gran capacidad de emocionarnos, de hacernos vibrar, de ponernos contentos, de hacernos felices.

Una vez lo hemos soñado hay que pasarlo a la acción para conseguirlo y ahí es donde radica la dificultad. Lo difícil no es soñarlo, sino hacer lo que haga falta para conseguirlo. Y ahí es donde el gran porcentaje de las personas abandona.

Muchas personas piensan que no son capaces de soñar o de qué sirve soñar si al final nada va a cambiar. Seguro que habéis oído alguna vez algo así: “Con que pamplinas me viene éste ahora con esto de soñar, la vida es de verdad no de sueños” y muchas otras más que seguro que sois capaces de recordar o sentir que os hayan dicho o hayáis expresado a alguien de vuestro alrededor.

Pues veréis, el cementerio está lleno de soñadores, de personas que no se han atrevido, que no se creían merecedoras de perseguir aquello que les nacía desde el corazón. Hay un estudio en el que se pregunta a la gente antes de morir que les gustaría haber podido cambiar en su vida, y tod@s afirman el haber realizado más lo que querían en vez de lo que debían, es decir, seguir su intuición, sus pasiones, sus sueños, …, en definitiva VIVIR. Y ahora yo me pregunto ¿Cuándo voy a llegar a la meta? La respuesta es NI IDEA. Y cuando eso suceda ¿Cómo quiero que sea esa llegada? Esa sí la tengo clara, por la puerta grande.

Y sabiendo que La Vida es un viaje SOLO de ida (que no se nos olvide), qué necesito para que mi llegada sea atronadora. Lo que necesito es Vivir haciendo un ALL IN. Es decir, haciendo que lo más importante sea lo más importante, cometer “la locura” de ir a por mis sueños, aunque ello suponga que me vuelvan la vida patas arriba. Haciendo que Vivir sea mi opción, no mi renuncia. Con ello no estoy diciendo que sea un camino fácil sino que esun camino que va a merecer la pena en el que tendré que trabajar y mucho, pero no hay fronteras más grandes que las mentales, no hay mayor desperdicio que vivir a medias.

Os quiero invitar a que presionéis el botón de pausa un momentito, nada, solo unos 10 minutitos. Haceros ese Regalo. Parad el ruido externo y también el interno. Y pensad en vuestros sueños, sí a esos me refiero, esos tan vuestros. Y ahora… ¿Vives o Sobrevives?